MIS ARTÍCULOS: FINLANDIA O LUCHA SOCIAL

Fuente: Oier

Desde la emisión del programa "Salvados" en que el conductor de la emisión viajaba a Finlandia para investigar su sistema educativo, he oído, visto, escuchado muchos criterios que ensalzan ese sistema, a tener en cuenta desde luego, pero poca reflexión crítica sobre nuestra realidad: darse cuenta de que esa educación es el resultado de múltiples factores que provienen eminentemente de la sociedad y de la historia y cultura propias de Finlandia es un paso previo a conseguir que ésta sea eficaz. Su práctica en nuestro país resulta en la actualidad imposible en muchos centros docentes. Aprendamos e importemos lo realmente eficaz de otros sistemas de organización que se ajuste a nuestra realidad pero no pretendamos imitar una educación que proviene, como mejor lo explica a continuación el catedrático Álvaro Marchesi, de un una estructura social bien diferente. Fracasaremos si no comenzamos reflexionando sobre nuestra sociedad, cultura y valores, necesidades urgentes y compromisos que hay que ganarse... Su mensaje de prudencia es el que quiero defender desde aquí junto con un deseo de mejora, reflexión y autocrítica para la Educación en éste país. 

 Dice Álvaro Marchesi (catedrático Psicología evolutiva y de la Educación): "...sin embargo y a pesar del notable atractivo que ofrece la educación en Finlandia, lugar de peregrinación de políticos, especialistas y representantes de la comunidad educativa de muy diversos países, el primer mensaje que es preciso transmitir es el de la prudencia. La razón es bien sencilla: cada país tiene su historia, su cultura, sus tradiciones, su estructura social, sus valores, y en torno a todas estas dimensiones se ha ido construyendo su educación... Algunas informaciones pueden ayudar a comprender las diferencias entre ambos países. Su población no supera los cinco millones de habitantes, frente a los más de cuarenta de España. Sus ingresos per cápita son bastante más elevados y existe una mayor igualdad entre sus ciudadanos. Y si nos fijamos en la educación hay dos datos que muestran un claro contraste: el analfabetismo prácticamente dejó de existir en Finlandia al final del siglo XVIII, algo que no sucedió en España hasta bien entrado el siglo XX; y el 73% de las personas de 25 a 64 años tienen en Finlandia, al menos, una titulación de educación secundaria superior, un porcentaje que no llega al 40% en España. Estas diferencias han de ser tenidas en cuenta, pues el contexto social y cultural de un país, y también, de cada una de sus escuelas, tiene una indudable repercusión en el progreso educativo de sus alumnos y en los resultados académicos que obtienen. Lo que quiere decir que los progresos en la educación no dependen solamente de las reformas que se realicen en el sistema escolar, sino también y en gran medida de los cambios sociales y culturales que se impulsen. No hay mejor reforma educativa que elevar el nivel educativo y cultural de la mayoría de la población. (...) Mejorar la calidad en la formación, en el sistema de selección, en el compromiso y en la valoración social del profesorado. El acierto en estas dimensiones aparece como la variable educativa fundamental del éxito del sistema educativo de Finlandia (...)" 

 Creo que deberíamos estudiar o fijarnos más bien en el funcionamiento de la sociedad, aspirar a bajas maternales y paternales más completas, a luchar por el teletrabajo para la conciliación aboliendo esas comilonas de dos horas (con todos mis respetos, pero eso está totalmente "de mo dé"), por introducir el pensamiento crítico en el aula... y aunque el texto habla de que no todo son las reformas, con las que hacen en nuestro país lo tenemos difícil... Partimos de un encefalograma semiplano pero somos un pueblo valiente, con historia, digno de salir adelante. Y así lo haremos. Quizá reflexionar aquí mismo sea poner la letra alfa a un nuevo abecedario...